Enanito no es sólo un banderillero poderoso, que muchas veces sacrifica su lucimiento en aras de la eficacia lidiadora. Es también un gran fotógrafo y maestro del Photoshop, con el que hace auténticas obras de arte, que le han dado fama universal. Enanito ha sido reclamado por las publicaciones más prestigiosas, como el New York Times o la Hoja Parroquial de Arganda, pero ha rechazado todos los ofrecimientos para ocuparse personalmente de la imagen de Apoderao. No obstante, de vez en cuando organiza exposiciones en museos, porque como él dice, "normalmente no ponen más que garabatos, y yo soy partidario de culturizar un poco a los cabestros que pierden el tiempo en esos sitios." Actualmente prepara una exposición biográfica titulada "Los sitios en que estuvo castigao Enanito", y cree que la tendrá terminada para el año 2044 debido "a que tengo bastante material, porque en mi infancia he tropezao con muchos cabrones."

"Con la facilidad propia de los elegidos, Enanito coge la cámara, pulsa el botón, y obtiene unas fotos personalísimas. Sobre todo cuando se acuerda de quitar previamente la tapa al objetivo."